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Retraso mental leve, ¿cómo detectarlo?

febrero 14, 2019

El retraso mental leve, o discapacidad intelectual ligera, consiste en un ligero retraso del desarrollo (en relación con la gente considerada en la media), que no resulta limitante en cuanto a la autonomía personal o calidad de vida del niño.

El diagnóstico del retraso mental leve incluye la consideración de síntomas relacionados con facetas más allá del cuadro clínico. De esta manera, se analiza la salud física y mental del niño, es decir, sus problemas físicos, psicológicos y de aprendizaje.

¿Cómo se diagnostica el retraso mental leve?

Diversos aspectos del retraso mental leve

A continuación, te explicamos algunos aspectos básicos y que se repiten en los diagnosticados de este trastorno.

Aspectos cognitivos del retraso mental leve

Estos están basados en el Coeficiente Intelectual. En este punto, se analiza la capacidad de razonamiento del joven, su capacidad de planificación y cómo resuelve problemas, e incluso si es capaz de ejecutar tareas que requieran la intervención del razonamiento abstracto.

Aspectos adaptativos y ambientales del retraso mental leve

Se trata de la calidad de las conductas que ha aprendido e interiorizado el niño para su interacción con el mundo que le rodea. Para medir esto, se analizan las condiciones socioculturales del lugar donde debe convivir el pequeño.

Aspectos sociales del retraso mental leve

En este punto se analiza su capacidad de socializar, entender y asumir los distintos papeles que existen en la sociedad. Con esto se mide y se consigue entender el futuro del niño en la sociedad y se valorará la posibilidad de una plena integración en las situaciones comunes.

Discapacidad intelectual según la OMS

La Organización Mundial de la Salud establece los siguientes niveles de discapacidad:

  1. Discapacidad Intelectual límite: el CI de estas persona se encuentra en valores entre 68 y 85. Se trata así de niños que sólo muestran ciertos síntomas de retraso en el aprendizaje.
  2. Discapacidad Intelectual ligera: personas de coeficiente situado entre 52 y 68. Se trata de niños que muestran ligeros retrasos motores y en la percepción. De adultos, pueden llevar una vida perfectamente funcional e independiente, adaptados a la sociedad y al mundo laboral.
  3. Discapacidad Intelectual moderada: se trata de niños con coeficientes situados entre valores de 36 y 51. Estos evidencian problemas de comunicación verbal y les cuesta entender ciertos factores de su entorno, pero en su etapa adulta pueden llevar una vida independiente.
  4. Discapacidad Intelectual severa: se trata de los jóvenes con un coeficiente de entre 20 y 35, lo que supone que son personas dependientes. Su deterioro motor y psicológico limita gravemente su independencia.
  5. Discapacidad Intelectual profunda: incluye a cualquier persona cuyo CI presenta valores inferiores de 20 y que padecen un evidente y grave deterioro psicológico, motor y cognoscitivo.

Tipos de discapacidades mentales según la OMS

Retraso mental leve actividades educativas

Los niños con discapacidad intelectual leve logran, con la ayuda adecuada, una autonomía en el cuidado de sí mismos, además de una casi plena integración social. En cuanto al nivel escolar, pueden escolarizarse en colegios normales y superar sin apenas problemas la educación primaria.

La adaptación del entorno educativo a estos niños incluye adecuar los materiales didácticos y el espacio físico donde se les imparten las clases.

Adaptación del aula

  • Eliminación de barreras arquitectónicas.
  • Aulas protegidas de ruidos del exterior que puedan disminuir la capacidad de concentración de los pequeños.
  • Iluminación suficiente, a ser posible de luz natural.
  • Existencia de material visual de apoyo colgado en los muros del aula en formato de carteles o dibujos que aporten tranquilidad y seguridad a los pequeños.

Material escolar

Los niños con retraso mental leve presentan algunas limitaciones ante los conceptos abstractos. Este ligero trastorno se compensa mediante la utilización de materiales táctiles o visuales con los que el niño puede asimilar los conceptos y experimentar con ellos.

Estos objetos son, entre otros: plastilina, ábacos, pinturas, lápices de colores, juguetes de construcción o puzles. En cuanto al software educativo, se buscan programas de navegación sencilla y que no sobrecarguen al niño de información.

Material escolar para niños con retraso mental leve

Retraso mental leve en niños y su evolución

Cada niño progresa a un ritmo particular. Por eso, menos del 50% de los problemas psicomotrices de los niños se detectan antes de su entrada en la escuela.

Para ello, existe una batería de test que se pueden realizar para obtener una valoración sobre su madurez psicomotriz, la cuál consiste en la mejora de habilidades regidas por el sistema nervioso central.

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Test de Denver

Gracias al test se puede conseguir una detección temprana de futuros problemas psicomotrices del pequeño. La Escala de Denver consiste en analizar los resultados de una serie de pruebas que se comparan con los de niños de igual edad cronológica.

El Test de Denver utiliza cuatro categorías de evaluación:

  1. Desarrollo de motricidad gruesa: se trata de habilidades motrices relacionadas con movimientos amplios con poca precisión y uso de fuerza física. Para su realización se necesitan los grupos de músculos grandes.
  2. Desarrollo de la motricidad fina: engloba movimientos que precisan destreza manual o de los pies. Por ejemplo, tareas de precisión con objetos.
  3. Destreza social: se analiza cómo es el contacto del pequeño con su entorno y cuáles son las relaciones del niño con su mundo circundante.
  4. Desarrollo de la expresión oral: consiste en un examen de la capacidad del pequeño para la comunicación, la escucha y la comprensión de los mensajes recibidos.

Mecánica del test

Se utilizan objetos comunes como un frasco con una tapa de rosca, una pelota, una campana, lápices o una madeja de lana. Los resultados que arrojan las pruebas son los siguientes:

  • Anormal: el test se considera anormal si existen dos o más fallos en dos o más áreas.
  • Dudoso: cuando hay dos fallos en un área o uno en varias.
  • Irrealizable: el número de fallos impiden la evaluación.

Mecánica del test de Denver

Juegos para niños con retraso mental leve

El objetivo de la educación especial es el entrenamiento del pequeño para la vida adulta, con el fin de que el niño logre desarrollar todo su potencial en todas las áreas.

Gracias a los trabajos de pretecnología los pequeños pueden expresar sus inquietudes, su mundo interior y hacer notar sus carencias y necesidades. La expresión plástica y las manualidades impulsan la maduración psicomotriz de los pequeños, mejoran su imagen de sí mismos y evoluciona su forma de expresarse; también mejora la capacidad creativa, las habilidades de observación y la capacidad de retentiva.

Por otro lado, se contribuye a la socialización del pequeño por la participación en actividades comunes con otros niños. Para constatar la evolución de la madurez de un niño, se valoran sus habilidades comparadas con las consideradas normales en el resto de niños. Las habilidades vinculadas a la adaptación del niño incluyen:

  • Análisis del desempeño cotidiano del niño: es decir, cómo se desenvuelve a la hora de cuidar de sí mismo, ir al baño, comer o vestirse.
  • Habilidades lingüísticas: s analizan la capacidad de interpretación del niño ante los mensajes que le llegan, y cómo maneja la información y responder a ella.
  • Destrezas sociales: se examinan la interacción del pequeño ante la familia cercana, los niños de su clase, o ante personas desconocidas.

Además, suelen utilizarse las siguientes pruebas para evaluar el desarrollo mental de los pequeños:

  • Prueba de Denver.
  • Test de inteligencia de Stanford-Binet.

Mecánica del Test de Santanford Binet

Test de Stanford-Binet

El Test de inteligencia de Stanford-Binet surge de la convicción de tener que clasificar a las personas con algún tipo de discapacidad intelectual. Para ello, se establecen las siguientes clasificaciones según el Coeficiente Intelectual (CI) de la persona:

  • Valores sobre 140: nivel de inteligencia de genio, o casi genio.
  • Valores entre 120 y 140: inteligencia muy superior.
  • Valores entre 110 y 120: inteligencia superior.
  • Valores entre 90 y 110:nivel de inteligencia en la media.
  • Valores entre 80 y 90: inteligencia torpe.
  • Valores entre 50 y 70: moronismo.
  • Valores entre 20 a 50: imbecilidad.
  • Valores entre a 20 ó 25: idiocia.